En torno al Año de la Misericordia, durante los meses de febrero a mayo, vamos a disfrutar de una pequeña y sencilla celebración por cursos que nos acerque más al Amor de Dios. Su amor es tan grande, tan maravilloso, tan inmenso, que solo podemos sentir alegría y gratitud. Y eso es lo que queremos celebrar: que Dios se acerca a nosotros, que el Amor todo lo vence, que en su amor está nuestra paz y nuestra felicidad. Él siempre nos está esperando, como el Padre que busca a su hijo, como el Pastor que se alegra al encontrar a la oveja perdida.
En estas últimas semanas los cursos de 1º y 2º de Primaria han tenido ya su celebración. Jesús es el Pastor Bueno que no deja que el lobo nos haga daño. Y si alguno se pierde, lo busca hasta encontrarlo. A nosotros nos toca intentar ser misericordiosos como él. Cuanto más y mejor amemos, más nos pareceremos a Jesús.
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